Cuando la tristeza irrumpe en nuestras vidas genera un malestar que intentamos eliminar a toda costa, pero la tristeza también conforma un mensaje útil para nuestro equilibro psíquico.
¿Las emociones son necesarias?
Imaginemos que estamos al volante de nuestro vehículo y se enciende una luz roja en el cuadro de mandos que nos informa que nos estamos quedando sin combustible. Gracias a esta información pararemos en la primera gasolinera y repostaremos. Las emociones, de igual manera, son señales informativas que dirigen nuestra conducta en las situaciones que vivimos. Nos ayudan a tomar decisiones y a adaptarnos a la realidad ya sea esta positiva o negativa.
¿Qué es la tristeza?
La emoción de la tristeza es una de las 6 emociones básicas presentes en las personas. Dentro del grupo de emociones básicas podemos diferenciar entre agradables y desagradables y, como ya puedes imaginar, la tristeza es una de las desagradables.
La tristeza es una reacción emocional que surge cuando perdemos algo importante. La intensidad de lo que sentimos depende de cómo cuantificamos la pérdida.
La tristeza es la emoción que activa el proceso psicológico que nos permite superar pérdidas, desilusiones o fracasos. Nos permite establecer distancia con las situaciones dolorosas para impulsar la interiorización y cicatrización del dolor generado por ellas. Así mismo, el sentir tristeza, nos ayuda a empatizar con la tristeza de los otros y así crear redes de apoyo y consuelo.
Se genera a partir del Miedo existencial de la primera etapa de vida, dentro del desarrollo evolutivo .
Como se trata de una emoción básica, ponerse triste en algún momento, debe ser asumido dentro de la más estricta normalidad, así que te animo a permitirte estar triste, a expresarla y a compartirla siempre que lo necesites.
Cuando nos sentimos tristes nos replegamos sobre nosotros mismos, nos aislamos para iniciar el proceso de gestión de la emoción, este comienza con la generación de pensamientos alternativos sobre la situación traumática que nos ayudan a encajarla en nuestra vida e historia personal. Acto seguido se produce una reorganización de las conductas que emitimos para adaptarnos a la nueva realidad que nos toca vivir con nuestras pérdidas, desilusiones o fracasos.
Por tanto la tristeza es una emoción útil aunque dolorosa puesto que es el punto de arranque del proceso de aceptación de una realidad que nos daña.
¿Para qué sirve? ¿Cuál es su función?
La tristeza sirve para enterarnos de la pérdida de una relación que hayamos establecido, ya sea con una persona, animal o cosa. En este sentido, las causas de la tristeza serán las rupturas o pérdidas de relaciones afectivas.
Por ello, la tristeza resulta imprescindible para poder despedirnos, ya que si no sentimos tristeza no seremos conscientes de que hay una pérdida. Internamente hacemos un proceso emocional que nos “informa” de que alguien con el que tenemos un vínculo ha dejado o dejará de estar con nosotros.
También puede ocurrir lo contrario, y que sintamos tristeza sin razón, es decir, sin haber una pérdida. En estos casos suele ser otra emoción que falsamente sentimos como tristeza y, por lo tanto, no será tristeza auténtica.
Como ejemplos de situaciones que generan tristeza podemos poner las despedidas de personas que se van lejos, el fallecimiento de alguien a quien queremos pero también, no conseguir un proyecto que hemos buscado, etc.
También podríamos decir que la tristeza sirve para ahorrar recursos, ya que despierta la empatía de las personas que están a nuestro alrededor. De esta manera, nos ayudan y tratan de vincularnos de nuevo al grupo con nuevas emociones y afectos. Es incluso una manera de replantearnos las prioridades de la vida y hacer cambios en nuestros objetivos.
A continuación te dejo con este interesante vídeo en el que nos habla precisamente de la Tristeza.
¿Cómo se expresa la tristeza?
Antecesores: Darwin - Lorenz
1 La expresión de tristeza en los animales ya fue descrita en 1872 por Charles Darwin en su libro “La expresión de las emociones en el hombre y en los animales”. En este libro, Darwin defendía su tesis evolucionista indicando que el hombre compartía muchas funciones con los animales aunque había ido mejorando en la escala evolutiva.
Los hombres somos seres sociales que vamos construyendo nuestra supervivencia y que mejoramos nuestra adaptación construyendo grupos y relaciones de apego con las personas que significan más para nosotros. Algunas de estas sensaciones, son el enamoramiento cuando una persona del grupo pasa de ser un extraño, a una figura esencial, o la tristeza, que nos hace sufrir tras la pérdida, provoca empatía en otros miembros del grupo o nos hace reorientar nuestra vida.
2 Konrad Lorenz fue un destacado etólogo que describió la expresión de la pérdida. Como aclaración, la etología es una rama de la biología y de la psicología experimental que estudia el comportamiento de los animales. El ejemplo que utilizó Lorenz fue el del comportamiento de una oca al perder a su pareja. La oca se comportaba de manera ansiosa para encontrarla de nuevo, se mostraba ansiosa, llamaba a la pareja perdida y la buscaba de forma desesperada.
La tristeza, además es un estado que se mantiene de manera más prolongada a diferencia, por ejemplo, del miedo. Esto se debe probablemente a que se requiere más tiempo para habituarse a la pérdida que se ha sufrido, normalmente irreversible, que para readaptarse a la normalidad cuando ha pasado la situación de peligro. También, tras la pérdida hay un periodo de duelo o de readaptación durante el cual hay muchas manifestaciones de tristeza.
El periodo de duelo es habitual, ya que se requiere cierto tiempo para restablecerse. Durante este periodo se ve la vida de otra manera, cambian los sentimientos, el humor, el comportamiento… y cuando finaliza, se vuelve a la normalidad. Sí es cierto que hay duelos normales y otros que se complican hasta llegar a un trastorno emocional del estado de ánimo, pero siempre hay que tener en cuenta que se trata de un proceso, no de un estado.
Manifestaciones
La tristeza se manifiesta de múltiples formas y en diferentes niveles:
- A nivel físico encontramos llanto, retardo psicomotor, rostro abatido, falta de apetito, problemas de sueño...
- A nivel mental hay una focalización de la atención en la situación problemática, dificultad para mantener la mente en blanco, problemas de concentración, pensamientos intrusivos sobre la situación...
Entonces: como para cada emoción, hay multitud de formas de expresar tristeza:
El llanto
Sobre el llanto
¿Es reprochable llorar cuando sentimos tristeza? ¿es de personas vulnerables? ¿nos hace menos que los demás?
Cuando la tristeza te invade lo mejor para poder expresarla es el llanto. Llorar, ni más ni menos.
Resulta preocupante que entre los adultos no es difícil encontrar personas que no lloran nunca, lo cual supone una dificultad para expresar su tristeza.
Rebobinando:
Tenemos incorporadas ideas sobre el llanto que nada tienen que ver con la realidad. Mucha gente bloquea el llanto cuando apenas empieza a notar que se va a poner a llorar, como si fuese a adentrarse a un pozo de tristeza del que no vaya a poder salir..
Es importante saber que el proceso del llanto tiene una gráfica definida que se inicia lentamente y poco a poco va aumentando de intensidad progresivamente. Va a llegar un punto de intensidad máxima, que es algo parecido al “festival del moco”, tras el cual irá disminuyendo el llanto.
Otras formas de expresión de Tristeza sin llorar
Además del llanto, hay otros canales en los que poder apoyarnos si nos sentimos tristes.
Tanto la pintura como el dibujo pueden ser un magnífico vehículo de expresión emocional a través de la expresión libre, y en el caso de personas con dificultad para llorar, puede ser muy útil, que al menos se permitan, pintar sus lágrimas.
Otra herramienta con la que poder llorar sin llorar es la escritura. Siéntate delante de una hoja en blanco y empieza a escribir lo que se te vaya ocurriendo, sin filtrar, aunque no le encuentres sentido, tú sigue escribiendo y deja que tu tristeza se exprese a través de tus palabras.
¿Cómo se siente en el cuerpo?
En el cuerpo puede sentirse de muy diferentes formas, que van a variar según el momento, el estímulo que genera la tristeza y la persona que la experimenta.
Puede experimentarse:
- Desesperanza por el futuro.
- Apatía y pocas ganas de hacer cosas.
- Pérdida de interés en temas que anteriormente te gustaban.
- Puede sentirse con aumento de sueño, o por el contrario con insomnio.
- Lo mismo puede pasar con el apetito, ya que pueden darte ganas de comer más de lo habitual, o al revés, quitarte el hambre casi por completo.
- Alteración de la percepción de la temperatura, lo que normalmente se traduce en mayor sensibilidad al frío.
¿Qué hacer con la Tristeza? ¿Cómo enfrentarla?
Para poder gestionar esta emoción, es fundamental identificar la presencia de la misma, ser conscientes de ella, del cansancio y de la apatía que la acompaña.
Aceptarla, la tristeza no es signo de debilidad, debemos permitirnos estar tristes, contrariamente a lo que nos dicta la sociedad de control emocional.
Dicho todo esto, ahora depende de ti y de qué quieres hacer con tu tristeza. Ahora que ya sabes que guardarla no te va a ayudar, que reprimirte solo empeora tu sistema emocional debes decidir cómo quieres gestionarla a partir de ahora
¿Piensas seguir llorando a escondidas?
Y la próxima vez que tengas ganas de llorar, ¿vas a seguir negándote lo bien que te hace?
Los cambios que te propongo no son nada fáciles porque, como podrás imaginarte, no basta con pensarlos o conocer la teoría.
Buscar soluciones, si es algo sobre lo que podemos actuar debemos orientarnos a la acción para eliminar la situación que nos genera la tristeza, por ejemplo si estás triste por una discusión con alguien puedes hablar con la persona para resolver el malentendido. Si la la tristeza es fruto de una situación que no tiene solución, por ejemplo la muerte de un ser querido; busca consuelo en aquellas personas de tu entorno que sepan escucharte y comprenderte. El expresar las emociones ayuda a superarlas. Intenta mantener tus actividades diarias en la medida de lo posible, e incrementa las actividades agradables, te ayudará a equilibrar tu tono emocional.
Practicar ejercicios de relajación cuando tu mente se quede anclada en la tristeza también te ayudara puesto que te permitirá redirigir tu atención evitando así "darle vueltas a la cabeza".
Para los procesos derivados de la gestión emocional tienen una enorme importancia el trabajo terapéutico para poder ir dejando atrás la influencia que las malas experiencias puedan tener en nuestro presente.
Así que, en la misma línea de antes, si crees que para expresar tu tristeza necesitas de la ayuda de un profesional te animo a que des el paso de buscarlo. Sin duda, será la primera de muchas decisiones que te permitirán vivir tu vida con mayor plenitud.
Conclusión
Adaptativa
Recuerda que la tristeza es una emoción necesaria y adaptativa.
Natural
Además, nos permite reorganizar nuestra vida y superar los eventos traumáticos, por tanto, sentirla forma parte de un proceso natural.
Bibliografía:.
https://bemocion.sanidad.gob.es/
https://galene.es/
https://www.psicoglobal.com/
